11 de julio de 2006

El encanto del papel...

Las obras desnudan la ligereza y versatilidad del papel. Las piezas son confeccionadas en cartapesta con rigurosa paciencia y herramientas de mano. El uso de una técnica milenaria como la “cartapesta” -o pasta de papel maché- encauza las manos y creatividad. Livianas. Duraderas. Originales.

Estas son algunas de las características que priman sobre las piezas moldeadas con papel de diario engrudado, cola vinílica y otros materiales. Muchos de ellos de bajísimo costo.
La materia prima es muy noble. Tiras de papel de diarios viejos remojados en agua y superpuestos unos con otros, pegados con engrudo, forman una estructura consistente: la cartapesta. Después, el ingenio y la inventiva hacen su juego.

Para este desafío, se utilizan otros accesorios que aportan los detalles finales, como papel madera para dar efecto cuero; papel servilleta, efecto metal; papel maché, efecto piedra...Una variedad de técnicas y métodos artesanales.

Sin más palabras, cedo el lugar al encanto por transformar una simple hoja de papel en una pieza única e irrepetible.